Está vez es serio.
Como muchos saben yo estudié psicología con énfasis en psicología social. Estudié en la UAEH y siendo franco nunca me sentí orgulloso de mi universidad como hasta ahora, ahora que ya no soy estudiante; pero no lo digo por la nostalgia de extrañar los pasillos, las clases, l@s profes, compañer@s y un sin fín de cosas totalmente sentimentales. Me enorgullezco por la nueva generación de estudiantes ocupados en tratar de hacer no solo un país mejor, sino también una universidad que siempre ha estado llena de irregularidades, donde a los alumnos no les interesaba lo que pasaba en la escuela porque no se sentían parte de ella.
Hoy eso ha cambiado.
Ayotzinapa fue un parte aguas para entender que no solo la UAEH sino todo México está hastiado de la política, la economía, el abuso de autoridad, la prepotencia y una lista sin fin sobre México y su vida moderna, por moderna me refiero a lo que ha sucedido desde el 68 más o menos.
Hoy estamos cansados... Pero de verdad, estamos hastiados: de los robos de elecciones, o si no robos al menos ilegalidades muy duras, que si queremos a la nación, nos han dolido; de los malos contenidos de televisión, de la mala información y manejo de ésta en los medios. Quienes te rabajan, ciertamente, pero no para informar a la sociedad, sino para confundir; de la impunidad; de la mala percepción y el poco o nulo respeto que nos tienen nuestra propia clase política hacia nosotros, la sociedad civíl; de los casos de corrupción (Bejarano, tarjetas Soriana, ley Televisa entre muchos, muchos otros). Esto era una bomba de tiempo... Y comienza a estallar.
Llegó el IPN y se mostró el descontento, le siguió Ayotzinapa, el #YaMeCansé, la poca o nula respuesta del presidente y su huida hacia China, (donde en su viaje tampoco le fue bien), Casa Blanca y ahora el director de la CNDH quien fue el encargado del caso Colosio y otros de gran importancia que se resolvieron al clásico carpetazo. No sé si lo hacen a propósito, pero me da miedo pensar que sí, no que hagan sus movimientos tan visualmente, sino que crean que no tenemos memoria y no recordamos. ¿Porque me da miedo eso? Porque entonces significa que nos toman por idiotas, lo que significa que los idiotas serían ellos.
Bajo ese contexto, como una oleada de agua helada, casi congelada, los alumnos de la UAEH deciden hacer escuchar su voz, deciden apoyar lo que sucede en el país (el descontento) y que, como el resto del país, estamos hastiados. Sin embargo al parecer todo sistema de poder tiene una premisa, al menos en México, "lo que nosotros queremos, o nada" y entonces intentan dar nada... Y no es suficiente, ahora parece que están dando algo, sí, sin duda... Agresiones. Pero los estudiantes ya no se merman, los estudiantes están más activos que nunca y son conscientes de una realidad social que realmente les compete. Ahora, no solo apoyan una voz nacional, incluso internacional, sino que entendieron que también se necesitan cambios internos, a la mano, en la Máxima casa de estudios... de Hidalgo, y los señores de arriba de la universidad deben entender que no es malicia, ni odio, al contrario: es amor a la universidad la que ahora exige que la universidad responda y cambie, que realmente haya un diálogo a través de canales aceptados por todo el cuerpo estudiantil y no impuestos por los escritorios, impuestos hace años, hace generaciones y que si en algún momento representaron los intereses del estudiante hoy ya no lo hacen. Yo estudié toda mi escuela en la UAEH, por toda me refiero a prepa y universidad, y sinceramente, hoy no puedo decir otra cosa mas que precisamente hoy que ya no estoy estudiando pero fue mi alma madre, hoy con este grupo de chavos informados, críticos y sobre todo activos es que sí me siento universitario, hoy me enorgullece decir que fui Garza y me da pena saber lo que no hice. Pero hoy alguien lo hace y eso es mejor a pensar que nadie lo haga.
Por último, extrapolemos estos hechos sucedidos en icshu, ida, ICSa e ICEA al país y es lo mismo: los manifestantes no quieren hacer destrozos, no quieren dañar un proyecto de nación que al menos en lo personal hasta ahora no le encuentro pies ni cabeza. Sino que son personas que realmente aman a su nación y que quieren algo mejor para ella y para todos nosotros.
Me despido. Y les agradezco su atención.
